A quién va dirigido la práctica de Mindfulness

Hay que resaltar que de manera clara y contundente la práctica del Mindfulness reporta beneficios importantes a cualquier persona independientemente de sus capacidades, su cultura, su religión o condición social o económica.

Es decir, no se requiere que en la persona practicante de Mindfulness confluya algún tipo de circunstancia física, emocional, mental o espiritual.

Dicho claramente y sin ambages, la práctica de Mindfulness es recomendable para todo ser humano.

No obstante, también podemos afirmar que si te sientes identificado/a con alguna de estas descripciones, Mindfulness está especialmente dirigido a ti:

  • Percibes que tu vida se rige por un extrés excesivo y no sabes muy bien qué hacer al respecto
  • Sientes que los problemas de sobrepasan y te acucian los miedos y la ansiedad.
  • En numerosas ocasiones te sientes triste, deprimido/a y desanimado/a, y percibes que esos estado te van desgastando poco a poco.
  • Te lamentas por no cumplir tus objetivos y no llevar a cabo tus planes en el ámbito personal, familiar y profesional.
  • Te sientes culpable o te arrepientes de hacer determinadas cosas o comportarte, sentirte o pensar de algunas formas.
  • Deseas una vida más plena y satisfactoria y con mayor sentido.
  • Anhelas ser más feliz.